Lo peor ha pasado, cariño, tenemos toda la madrugada para coordinar el nuevo plan de ataque.
martes, 29 de noviembre de 2016
Aquella noche retumbó la ciudad...
Aquella noche retumbó la ciudad, tal vez fue el
lecho donde salvajes nos reencontrábamos, te miré y me quedé perdida entre tus
labios. Te confieso que nunca me olvidé de ellos. Me abrazaste un segundo,
percibí que te habías ausentado y que obviaste mi beso, te mantenías a dos
centímetros acordonando la zona de minas, el perenquén y mi locura. Retomé la
conversación tácita, se me humedecieron los ojos recordando y me abrazaste de
nuevo.
Lo peor ha pasado, cariño, tenemos toda la madrugada para coordinar el nuevo plan de ataque.
Lo peor ha pasado, cariño, tenemos toda la madrugada para coordinar el nuevo plan de ataque.
lunes, 21 de noviembre de 2016
Se me acumulan la comida, la siesta y las ganas de ti...
Se me acumulan la comida, la siesta y las ganas de
ti. Y he decidido empezar por el final.
El nitrógeno me tiene descompensada, camino lenta,
sé que disfrutas observándome, yo sabiendo que lo haces. Imagino tus
profundidades y no veo el momento de entrar en ti, sin permiso. Acaricias mi
piel, arrugas mi nariz, humedeces mis labios, me agarro a tus manos como ancla
varada, me desato en una locura iniciática y salvaje, dejándome llevar.
Son las diez, de las nocturnas, aún reposas a mi
lado, observo tu nuca, tu espalda, siento tu respiración acompasada, sonrío.
En el estéreo la guitarra de John Mayer, me incorporo
y avanzo desnuda hacia la terraza, en la oscuridad todo se silencia, los
defectos, los pliegues, las cicatrices, los miedos, las debilidades, pero a
estas horas es tarde para dar marcha atrás, no tengo un cuerpo perfecto ni el
corazón sano, tampoco adivino a dónde voy, sin embargo adoro que estés
rompiéndome los esquemas, que hayas llegado sin preguntas y que tomes café solo
y en ocasiones conmigo.
lunes, 14 de noviembre de 2016
Hoy es un lunes diferente...
Hoy es un lunes diferente, lleva un sello de marca,
la luna más ingente vista en los últimos años, así se presenta el día. Yo amanecí
con tu tontería y mi risa, el café y unas tostadas con una gotita de aceite. Nos
despedimos sin mucho boato, te dije eso de “que tengas un buen día” y tú me
soltaste uno de tus enigmáticos mensajes.
Confieso que ya tengo ganas de que llegues, la cerveza está enfriándose, la música ambientando el salón, visto lencería negra y he apagado la luz, tan solo la mecha de una vela delinea la sala.
Oigo la puerta, tus pasos encaminándose hacia donde estoy, tu voz y esa forma tan peculiar que tienes de volverme loca sin tocarme.
Hoy es lunes, pero no uno cualquiera, no, hoy vamos a amarnos bajo la luna más inmensa de los últimos años.
Confieso que ya tengo ganas de que llegues, la cerveza está enfriándose, la música ambientando el salón, visto lencería negra y he apagado la luz, tan solo la mecha de una vela delinea la sala.
Oigo la puerta, tus pasos encaminándose hacia donde estoy, tu voz y esa forma tan peculiar que tienes de volverme loca sin tocarme.
Hoy es lunes, pero no uno cualquiera, no, hoy vamos a amarnos bajo la luna más inmensa de los últimos años.
martes, 1 de noviembre de 2016
Cicatrices...
Esas huellas me convierten en lo que soy ahora, y esto nunca no voy a renunciar.
Etiquetas:
amor,
cicatriz,
herida,
huella,
Levia,
mapa,
maquillaje,
microrrelatos,
música,
profundidad,
Sidecars,
vida
Suscribirse a:
Entradas (Atom)